Avance de Kirby Star Allies


En menos de dos semanas llegará Kirby a Nintendo Switch, su nueva aventura se llama

Kirby Star Allies

y llega dispuesto a convertirse en el plataformas cooperativo más divertido de la consola. Poca broma con eso. Estamos en el primer aniversario de la última consola de Nintendo y la adorable bolita de color rosa tiene la complicada tarea de atraer a los aficionados que todavía no han caído en la tentación de la híbrida máquina. Kirby no cuenta con el renombre de Mario o Link, pero siempre cumple cuando hace falta sumar atractivos al catálogo de una consola de Nintendo. En esta ocasión, HAL Laboratory opta por un desarrollo clásico en dos dimensiones con las adquisición de las habilidades como

gimmick

, con el cooperativo para cuatro jugadores como principal reclamo. Se ha dejado de lado la estética de manualidades, lana y fieltros de

Epic Yarn

, el llamativo juego de Wii. En esta ocasión se han centrado en mostrar a Kirby al natural, con su apariencia más tradicional y todo el colorido al que nos tiene acostumbrados.

Para todos aquellos indecisos y para los que ya lo tienen bien claro, en la eShop de Switch hay disponible una demostración que permite jugar dos niveles completos de Star Allies catorce días antes de que se ponga a la venta oficialmente. A nosotros nos ha encantado. La fórmula es la misma de siempre, con Kirby como principal reclamo mientras flota con sus bocanadas de aire y adquiere nuevas habilidades al tragarse a sus enemigos. La novedad en esta ocasión será el “poder de la amistad”, de manera que podremos lanzar un enorme corazón rosa a los personajes que nos encontremos para que se coloquen a nuestro lado para terminar la aventura.

Y es que el poder de la “amistad” es muy poderoso, permite que hasta tres individuos se pongan a nuestro lado, cada uno con sus peculiaridades y habilidades. Sobra decir que otros tantos amigos podrán unirse con sus correspondientes Joy-Cons, siempre con Kirby como principal referente ya que si uno de ellos decide aventurarse muy hacia adelante (o al quedarse rezagado) rápidamente volverá al lado de nuestro protagonista, que para eso es la estrella de su juego. En realidad el juego es muy asequible, saltar y atacar es tan sencillo como cabría esperar, mientras que hacer amigos o despedirlos de nuestro grupo es tan simple como en Tinder. De esta forma, Kirby podrá portar una espada (si asimila al individuo adecuado), mientras que su séquito tendrá las habilidades propias de su especie. Lo bueno es que si pulsamos hacia arriba en el stick, podremos transmitirle las propiedades de un personaje a nuestra espada (o a lo que llevemos) de forma que podremos tener un arma en llamas, de agua, de hielo o de electricidad. Al poco tiempo nos daremos cuenta que esto es la clave para conseguir todas las piezas de puzles que forman los coleccionables repartidos por los niveles, ya que para activar una enorme bomba que nos abra el camino deberemos cortar la cuerda y prender la mecha con la llama, todo a la vez.

El juego es precioso, colorido como un puesto de chucherías. Quizás, demasiado, diabéticos abstenerse. Nuestro algodón de azúcar preferido salta y se mueve a las mil maravillas, pero tenemos el problemas de perderlo de vista al moverse con su pandilla. No es algo muy grave, pero si jugamos con más amigos corremos el riesgo de desorientarnos un poco entre los saltos, los poderes y los enemigos que aparecen en pantalla. Nos encantan los enemigos finales, la cantidad de patrones y movimientos es generosa, pero sobre todo nos atraparán por la simpatía que desprenden. Conforme progresamos vemos que los niveles ganan en complejidad… pero está claro que es un juego para todos los públicos y que han pensado que ningún peque se quede sin sabes qué hacer. Ideal para que los menos habituales cojan soltura con los títulos de acción y plataformas.

Al tener cuatro personajes jugable en pantalla, se han estrujado las meninges en aportar variedad a la hora de conjugar sus habilidades. No solamente enlazaremos poderes a las armas, en ciertos momentos, usaremos el poder del amor para formar una gran rueda entre los cuatro que haremos saltar si pulsamos de forma sincronizada o haremos el trenecito como si del Conga Master se tratase. En ese sentido, cada nivel esconde una detalle que nos dejará con una sonrisa de complicidad en la cara. No será el juego más difícil de Nintendo, más bien todo lo contrario, su caótica puesta en escena al jugar tantos jugadores provoca que perdamos precisión y reflejos a la hora de movernos, pero a cambio asegura muy buenos momentos y muchas risas. El combate por ser el juego más kawaii de Nintendo ha comenzado entre Lovers in a Dangerous Spacetime y este Kirby Star Allies, en dos semanas tendremos un solo vencedor.