Microsoft anunciará más de diez juegos para Game Pass en el X018


Este próximo 10 de noviembre tendrá lugar en México el X018, uno de los eventos más importantes de la consola de Microsoft en los últimos años y, ante eso, Major Nelson ha hecho un repaso de lo que podremos ver, o al menos de lo que de momento se puede contar.

De entre todo lo que ha comentado, además de mencionar juegos como Forza Horizon 4, Minecraft, State of Decay 2, Sea of Thieves o el próximo Crackdown 3, lo que más ha llamado la atención es la confirmación de que se anunciará aproximadamente una docena de juegos para uno de los servicios estrella de Xbox One, Xbox Game Pass.

Hay muchas especulaciones al respecto, pero este sábado, 10 de noviembre, veremos finalmente de lo que se trata. De momento, el catálogo actual es el que podéis ver en el vídeo incluido en la noticia, a falta del recién añadido Grip. Cabe destacar que en unos días desaparecerá Fallout 4 del repertorio.

Análisis de Lumo



Analizado en Nintendo Switch. Copia digital proporcionada por Rising Star Games.

La última consola de Nintendo mantiene el goteo de títulos independientes que ya han aparecido en otras plataformas. Hoy toca hablar de Lumo, un juego que exhuma los restos arqueológicos de nuestro querido Spectrum (sí, tuve uno que me acompaño toda mi niñez), sobre todo los juegos de perspectiva isométrica que daban esa sensación de tres dimensiones tan conseguida. Ya analizamos Lumo en su día, pero con su estreno en Switch hemos querido darle una segunda revisión, una vuelta para desgranar este regreso de un género perdido por el paso del tiempo. Lumo es hijo de Gareth Noyce, que pasó de Crackdown 2 y Ryse a fundar su propia desarrolladora de juegos independientes. El logo de su empresa viene precedida de una carga de datos con los colores y ruidos propios de un Spectrum. Sí, ahí, lloré.

Pero el árbol familiar tiene más ramificaciones, si Gareth es el padre, Jon Ritman y Bernie Drummond son los abuelos. Estos dos señores británicos son los artífices de la edad dorada de Ocean Software en la década de los ochenta, con los videojuegos Batman y Head Over Heels como joyas indiscutibles del plataformeo isométrico. Con aquellos mimbres se ha forjado Lumo, hasta le punto que en las primeras pantallas del juego encontraremos una pintada que reza que los dos citados creadores pasaron por allí (JD+BR) con dos calaveras apiladas una encima de la otra como si del juego de perrito con brazos y el gatito con pies se tratase.

Pero empecemos por el principio, nuestrx niñx protagonista (podemos elegir su sexo y el color predominante de su ropa) visitará una modesta exposición de juegos retos hasta que al más puro estilo Tron, quedará atrapado dentro de uno de ellos con la apariencia de un pequeño mago, que por cierto, nos recuerda poderosamente a la estética empleada por Rareware durante su etapa ochentera. El juego está dividido por habitaciones en las que se insinúan las puertas que no se ven por el encuadre mediante la presencia o ausencia de un par de losetas. Como ocurría en los títulos de Ritman y Drummond, nuestro personaje comenzará su aventura muy limitado, con las únicas variantes de moverse y dar unos brincos tan pequeños que sonrojarían al mismísimo Kiko Rivera. Al poco, tras valernos de nuestra astucia, habilidad y el socorrido ensayo y error conseguiremos dar brincos de enjundia, nos haremos con el mapa de la zona… y si somos osados, con alguno de los coleccionables (casettes como los que se usaban en el Spetrum y patitos de goma principalmente) que hay repartidos por las más de cuatrocientas estancias del juego.

A partir de ahí, caeremos rendidos a sus encantos. El juego nos engatusa con sus puzles, saltos milimétricos y mecánicas viejunas (grité como un histérico cuando mi personaje saltó en un bloque y lo “cogió” como en Head Over Heels). Y así nos lleva de un sitio a otro, buscando esa llave que abre una puerta, para accionar esa palanca que levanta unas rejas o para verter una pastilla de jabón en un lodazal de veneno para que podamos saltar con las pompas que se generan. Cada “tramo” de habitaciones estará representada en un mapa, por lo que deberemos conseguir uno nuevo cada vez que empecemos un nuevo grupo de habitaciones. Lo bueno es que el mapa es más simple que las texturas de una Saturn, por lo que para orientarnos deberemos tener muy claras las referencias ya que no se indica nuestra posición en tiempo real. Si a esos sumamos la cantidad de secretos, habitaciones ocultas y peligros, tendremos juego para rato si queremos conseguir todos los logros que el título nos propone.

Ya, los gráficos no son nada del otro mundo y hay unos mínimo parones antes de entrar en cada habitáculo… todo eso está meditado y hecho adrede. Y si no lo está, se lo perdonamos igual. Si me apuran, un modo gráfico que recreara Lumo con la estética de los ordenadores de 8 bits sería la guinda del juego. Pero también se ha tenido en cuenta al jugador del siglo XXI, con esos tres sistemas de control para que elija el eje de referencia en el que quiere moverse o el modo “clásico” en el que nos limitan las vidas, nos quitan el mapa y sin poder guardar la partida como si estuviéramos en 1985. Terminarse el juego así tiene su mérito, igual que lo tiene el trabajo realizado por Gareth Noyce, un desarrollador que ha hecho el juego que a él le hubiera gustado jugar cuando era niño. O al que quiere jugar hoy para sentirse niño otra vez. El caso es que todos los jugadores que tienen actualmente Nintendo Switch y por los que ha pasado un Spectrum por sus manos quedarán embelesados por Lumo. Si no es tu caso y quieres comprobar de primera mano cómo se cimentó esta industria hace ya treinta años, no dejes escapar esta oportunidad.

El modo clásico. La cantidad de referencias. El diseño de los puzles.

Puede resultar áspero a los jugadores menos pacientes.

Un juego que transmite referencias y cariño a los clásicos por cada uno de sus píxeles. Si jugaste a los juegos de Ocean en Spectrum, ya tardas.

Crackdown 3 y Forza Motorsport 7 no ofrecerán doblaje en castellano

Los doblajes al castellano de juegos de Microsoft parecen ser cosa del pasado. Todo comenzó con

Quantum Break

y tras él

ReCore

tampoco llegó con subtítulos en nuestro idioma, y en ambos casos sólo llegaron localizados al castellano los subtítulos. El último caso de gran repercusión ha sido el de

Forza Horizon 3

, que tras una genial localización de las voces por parte de su anterior entrega, también acabó saliendo a la venta sin voces en nuestro idioma.

Ciertos usuarios de Twitter han comenzado a responder a los responsables de comunicaciones de Xbox España sobre los idiomas que incluirán los próximos lanzamientos exclusivos de Microsoft para Xbox One y Windows 10, y según parece tanto Crackdown 3, como Forza Motorsport 7 llegarán únicamente con textos en nuestro idioma, a pesar de que las anteriores entregas sí que tenían doblaje al castellano. A continuación te mostramos los tuits en los que Lidia Pitzalis (Category Manager de Xbox) y Juan Carlos González (PR & Social Manager de Xbox) han confirmado tal información.

Los usuarios elegirán los próximos personajes de Killer Instinct (PC, XONE)

Sean nuevos o cameos como Joanna Dark

Desde que Killer Instinct debutó en 2013 para Xbox One se ha convertido en el título de lucha más importante de Microsoft.

Actualmente está la tercera temporada en marcha con personajes como el General Raam, Tusk o Mira, y parece ser que ahí no quedará la cosa. Iron Galaxy ha abierto una encuesta para conocer los gustos de los usuarios y sus deseos, no necesariamente se cumplirán todas sus peticiones pero servirá para hacerse una idea del rumbo de su destino.

Tal como explicó Colt Yohman, community manager del estudio, la encuesta cita a nueve nuevos personajes que pueden dar forma al futuro del juego. La lista de candidatos incluye tanto a personajes totalmente nuevos, como una criatura lovecraftiana, Djinn, Eagle, Wendigo, Magic Archer, viejos conocidos como Eyedol (el villano principal de la primera entrega), cameos como Joanna Dark (Perfect Dark), El Agente (Crackdown), Brute (Halo) e incluso luchadores existentes remodelados y reimaginados para la ocasión: Shadow Orchid, Aganos ENT, Sharman, Cinder (pre-transformación) y Kelvin.